MUNDIAL DE SUDAFRICA-REFLEXIONESAl momento de hacer un resumen se mezcla sin duda lo afectivo y emocional con lo estrictamente deportivo.
Realmente resulta emocionante encontrarse con tanta gente de todo el mundo que ama tanto o mas que uno el squash que lo lleva a realizar miles de kilómetros para ingresar a una cancha y competir con todas las ganas representando a su país. Mayor es el impacto cuando hablamos con esa persona y nos dice “pero tu eres muy joven” (los 52 no son poca cosa) y tener en frente un “abuelo” ,como cariñosamente bautizamos el grupo argentino a los mayores y no tanto, de más de 70, con una condición física y mental impecable y una garra increíble que lo lleva a ingresar a una cancha a dejar todo.
La reflexión es inevitable, Dios quiera que un día la vida nos de el regalo de llegar a esa edad con esa salud y con esas ganas de vivir, compartir y disfrutar un deporte como el squash con amigos de todo el mundo que predican la misma filosofía de vida.
En lo deportivo en la previa esperaba encontrar jugadores con mucho control de pelota fruto de un práctica intensa y de muchos años a lo que pensaba contraponer mi buen estado físico y mi velocidad de pelota.
Eso ocurrió, pero además de control tenían velocidad, potencia y una excelente condición física con lo que los partidos fueron sumamente complicados y realmente haber llegado a semifinales resulta muy gratificante y me alienta a seguir entrenando y compitiendo para llegar mejor al próximo compromiso en New Zeland.
Les cuento como anécdota que en los últimos 4 meses para jugar un partido tenía que hacer 300 km ya que la cancha de Santa Rosa (ciudad en la que vivo) en La Pampa la estamos mudando de lugar y recien estará terminada en unos días, así que no fue fácil llegar en condiciones para el Mundial pero como bien dice el dicho “sarna con gusto no pica”.
Quiero brindar mi apoyo y colaboración, al que desearía se sumara toda la gente que ama este deporte, a Daniel San Martín, en su ilusión de realizar el Mundial en el año 2010 en Argentina tarea que sin el apoyo de todos sería imposible llevar adelante.
Como verán el balance es sumamente positivo por lo que aliento a todos los que practican squash a tener la experiencia inolvidable que tuvimos el pequeño grupo de argentinos que viajamos a Sudáfrica.
Por último y entrando en el aspecto personal e íntimo la alegría de tener tres nuevos amigos de fierro, Beatriz, Daniel y Bocha, gracias por los momentos compartidos y definitivamente ya ocupan un lugar muy importante en mis afectos.
TICHO FITÉ
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